ARTICULO 34

Una de las características que han impregnado las creencias sobre la
enfermedad incluyen antibióticos mental. Si intentáis de sugerir estrategias
alternativas a un paciente de cáncer o, por modestia, habláis a sus queridos
antes, (pero después de que vos han dicho que está enfermo), la frase que
se oye a menudo es: “Mi temor es que él (el enfermo) puede engañar a sí
mismo”. Lo que siempre me ha hecho enojar! Qué significa eso? Significa
que él necesita creer que la enfermedad? Debe estar convencido sin dudas
que tiene que morir, para morir? El problema de esta gente es tampoco se
da cuenta de esto. Quieren convencer, quieren participar en la operación de
la convicción de sus querido para que “morir” es la única cosa a hacer.
Estos idiotas, se definen: maridos, esposas, amigos, amantes. “Me
preocupa que él pueda engañarse…”. Una cosa increíble, después del dolor
del mal pronóstico, ya han preparado la tumba de sus queridos, están en
estado de agitación para el funeral, para ir conjuntamente a reservar el
nicho. Como segundo paso, para estar seguro de no dejar lugar a la
posibilidad, para estar seguro, van a consultar a un segundo especialista;
por supuesto, siendo una “respuesta”, un “diagnóstico”, se necesita coraje
para cambiar un pronostico anterior y también una asunción de
responsabilidad… está claro que es más fácil confirmar el diagnóstico
inicial, verdadero o falso. Después de todo, no es una misión hacer el
especialista, es sólo una forma rápida y libre de riesgo de tener dinero y la
reputación social. Una vez fuera del estudio de los “clientes”, su expresión
contrita, cambia: esto es sólo el trabajo… Por lo tanto, nuestro idiotas,
regresan a casa aún más convencido de que el asunto es inevitable. A
veces se hay alguien que ofrece algo alternativo o una técnica alternativa
experimental. En este punto, sin embargo, se dispara la pregunta:
“¿tememos que decirlo?” La respuesta abre debates de familia increíbles,
pero, a menudo, si se hacen las cosas “bien”, es el paciente que se muestra
“impaciente” a morir. Quiere adaptarse a la idea de sus “queridos”. El uso
de antibióticos mentales es esto. Aquí se describe el ingrediente activo,
que es el mecanismo mental adoptado. Las creencias depositadas en elinconsciente colectivo de miles de millones de “ovoide emocional” en una
especie de globalización (incluso en este contexto, que pelotas) están listas
para el utilizo, es suficiente creerle para activarlas…
Natural que, pase lo que pase, la manifestación de la creencia, como para
el ferrocarril de hace unos pocos artículos, es directamente proporcional a
lo que uno cree. Si usted cree que tiene que morir siete días a la semana,
va morir en poco tiempo. “Patología sin posibilidad” será la respuesta del
especialista, con el rostro contrito por lo poco que va a durar la entrevista…
Es algo absolutamente científico. Si lo creéis, si está convencido, entonces
deviene científico y sigue las reglas de la ciencia. Sus queridos comienzan
a considerarve “prácticamente” muerto; es la magia de la ciencia. En tal
situación, tenéis que llenar una estrategia de auto-defensa. Vamos a
empezar: lo primero que debe hacer es absolutamente combinan
metafísicamente dos opuestos; por ejemplo. derecha-izquierda… tenéis
cuidado de cada sensación corporal o mental, continúe con frío-calor, si
hubieras llegado caliente después de la primera, todo-nada si no hubieras
tenido señales. Vosotros tenéis que continuar con la unión de los opuestos
hasta que llegue el empañamiento visual o niebla. Una vez que tienes esto,
escribe en la niebla:
“Yo no te creo” en letras de oro y colocáis las palabras en el ovoide
emocional. El ovoide lo llamo así porque tiene la forma de un huevo y se
coloca en frente de ti, justo en frente de vuestro pecho derecho. Es como
una esfera que vos enseñará a ver; de todos modos y pone la frase “Yo no
te creo.” Hay que pulirlo menudo, quitar el polvo de los pensamientos,
tenéis que recordarlo. Una vez hecho esto, empezáis de nuevo con los
opuestos, hasta la aparición de una nueva niebla; reescribe la misma frase:
“Yo no te creo” y la posicionáis con las palabras exactamente en frente de
vosotros, a casi 50 centímetros de la nariz. Escribe una otra acerca de
vosotros, otra detrás de vosotros, entonces una a la izquierda y otra a la
derecha. Hace rotar esta “cruz” de escritas en sentido contrario, sin parar.
Están negando el especialista científico. Sus queridos van a salir del
sistema de inducción hipnótica… porque ¿sabéis una cosa? Si no lo crees,no funciona SU SISTEMA! Por esto utilizan los rostros contritos, por esto
definen “incurables” ciertas enfermedades. ¿Pero no te das cuenta de cómo
hablan? ¿No te das cuenta de los nombres increíbles e incomprensible que
dan a las enfermedades? Siendo especialistas en las “enfermedades”, saben
todo de la enfermedad, pero no saben nada de la salud! ¿Y sus queridos
confían en estos? ¡Creen en estos! Gracias a esta locura especialista de las
enfermedades, nadie sabe nada de la salud y, tampoco, le importa. Nacen
debates sobre temas como la eutanasia, la terapia del dolor, la donación de
órganos como una necesidad. La incredulidad de la situación es que, en
lugar de hacer nos reír más, empezáis el pensamiento: “¿si me pasa a mí?”
Luego siguen otros como: “sería mejor hacer un cheque? ” y con una serie
de sensaciones que cambian vuestra forma del ovoide. Ponga las palabras
en oro: “No te creo” significa hacer el tatuaje del ovoide y obligar la mente
habitual a leer este mensaje. No puede dejarlo allí sin leerlo, ella ha puso
allí todas las secuencias emocionales habituales y, cada su operación, para
ser hecha, necesita el pasaje de la mente habitual para “allí”. Este asunto es
verdaderamente revolucionario y hace efectos increíbles. Imagináis un
curso obligado donde cada vez la mente habitual sirve a un propósito, para
ejemplo un dolor de muelas, pero también una hinchazón o una verruga o
cualquier otra cosa, un tumor o una enfermedad rara (aquí sólo tienes que
creer en la enfermedad y va pescar este Jolly), para hacer activar la
secuencia debe ver la escritura! Esperaba de recibir el testimonio de
Fiorella y utilizarla para hacerve entender, con sus palabras, como es, pero
como todavía no la tengo y voy a hacer un resumen breve, por lo que
entonces podrás encontrarlo en los testimonios. Fiorella se hace golpear
por la mosquitera:
“Hola Franco soy Fiorella. Probablemente eres de vacaciones, he intentado
contactarte, voy a intentar de nuevo más tarde. La noche pasada he tenido
un pequeño y lamentable incidente; elevando la mosquitera de la ventana
con vistas al balcón, se ha encajado en la barra de aluminio, he intentado
de moverla, pero no fue capaz a controlarla y me ha golpeado, con unafuerza increíble, el lóbulo frontal izquierdo. Oí un mal indescriptible, he
pensado “¡me maté!!” pero luego empecé con el mantra, el vinagre y el
agua, el hielo y mantra para 2 horas. Un poco estoy mejor, he dormido
unas pocas horas. Esta mañana tengo un gran bache en la parte delantera,
es tal que me parezco a un extranjero, me duele sólo el toco en la distancia,
me duele todo el lado izquierdo. Ahora te pido ayuda telepáticamente y
con el correo electrónico, tengo que irme para las vacaciones y he decido
de no ir a la sala de emergencias, me harían hacer la placa de costumbre y
no sé qué más. He leído el artículo 34 donde cuentas de la uña… de mí sola
no puedo hacerlo, aunque lo intenté, si me puede ayudar, por favor…
Gracias Fiorella”.
Bueno, hacemos estas cosas y la obligo en una secuencia de “Mira a la
derecha” y mientras miraba hacia la derecha yo produjo una “niebla”
determinada por la unión de los opuestos. Una vez que llegué allí escribo:
“Dios es todo lo que es, si Dios es todo, nada puede existir que no es Dios,
entonces tu problema no existe porque no existes, yo no existo, y esto es
una ilusión”. La pongo en su ovoide ligeramente por debajo de las palabras
“Yo no te creo.” Cada vez que en el control realiza mentalmente sobre el
dolor y sobre el golpe, debe pasar de allí, a la derecha. Después de unos
pasajes, la palabra comienza a rectificar los regímenes en los que la mente
ha dirigido habitualmente. El dolor desaparece, pero seguimos. La envío a
mirarse a sí misma con el fin de restablecer el sentido de la vista; hacemos
una docena de miradas en el espejo y el azul de golpe desaparece, la
hinchazón desaparece, se hace de nuevo normal. El camino obligado ha
desgarrado la antigua carretera. Ve y dilo al especialista! Son ellos los que
engañan a la gente y montones y montones de idiotas le creen también.